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Principales beneficios de ir al spa con frecuencia

Desde dolores articulares hasta enfermedades respiratorias, las aguas termales y Spa ayudan a nuestro organismo a funcionar mejor y aumentan las defensas inmunológicas. También ayudan a sanar el cuerpo al "curar" la mente con dosis saludables de relajación.

Beneficios del spa

Un remedio natural, agradable y relajante, y además sin contraindicaciones. Hablamos de aguas termales, un auténtico placer para el "cuerpo y alma" conocido desde la antigüedad. Ir al spa, de hecho, permite reducir considerablemente el uso de medicamentos convencionales en el tratamiento de numerosas patologías. A lo largo de los años, muchos estudios han confirmado los numerosos beneficios de los spas

En particular, estos tratamientos están recomendados para el tratamiento de enfermedades respiratorias, pero también, en general, por su acción antiinflamatoria. Basta decir que la Organización Mundial de la Salud ha incluido la medicina térmica en sus objetivos hasta 2025. Por ello, pasar unos días en el spa será una inversión no solo para tu serenidad, sino también una forma de evitar perder tiempo y dinero en tratar dolencias estacionales que muy a menudo se pueden prevenir fácilmente.

Beneficios de las piscinas termales

Antes de elegir a qué spa ir, debes saber que: la composición del agua es diferente según la fuente utilizada. La diferente concentración de minerales hace que se dividan en sulfurosos, salsas, sulfatos, carbónico, arsénico - ferruginoso y bicarbonato. Solo necesitas saber cuáles son los más adecuados para los tratamientos específicos que necesitamos. 

Ahora veamos específicamente cuáles son los mayores beneficios que se pueden obtener de estos tratamientos y cómo aprovecharlos.

Las diferentes terapias 

El método de tratamiento que utiliza las aguas termales tiene un nombre antiguo, crenoterapia, que deriva del griego del griego crené, fuente. Los tratamientos se dividen en dos tipos: la crenoterapia interna que se realiza mediante la toma de agua mineral termal y la crenoterapia externa que utiliza balneoterapia, barros y cuevas.

Una terapia válida para enfermedades respiratorias

Probablemente sea el beneficio más conocido. El uso de vapores inhalados, de hecho, combate la sinusitis, las infecciones de oído, pero también el asma y la bronquitis.

Función antiinflamatoria

El bicarbonato de sodio y el azufre, de los que son ricas las aguas termales, tienen una reconocida acción antiinflamatoria. Por tanto, están especialmente recomendadas para enfermedades del sistema osteoarticular, como la osteoartritis y en particular para el buen funcionamiento de los cartílagos articulares.

Ayudan a la depuración y regularidad

Ir al spa y someterse a tratamientos específicos ayuda al buen funcionamiento del sistema urinario, previniendo, por ejemplo, los cálculos. El sistema genital también se beneficia porque estas aguas estimulan la contracción de las trompas, favoreciendo una regulación del ciclo menstrual.

Son buenas para la tiroides

Esta glándula es estimulada por la presencia de sales de yodo, cuyas aguas termales son generalmente muy ricas. Estas sales, de hecho, permiten que la tiroides funcione de la mejor manera.

Reforzar las defensas 

Uno de los mayores beneficios que se pueden extraer de los tratamientos de spa es aumentar las defensas inmunitarias que favorecen la producción de inmunoglobulinas secretoras y circulantes. Una forma saludable de prevenir las dolencias estacionales.

Propiedades antisépticas

Sumergirte en las aguas termales te permite tener un agradable "desinfectado". La elevada cantidad de sales halógenas como el yodo y el cloro, de hecho, permite el fortalecimiento de las enzimas presentes en los glóbulos blancos, que son los primeros defensores de nuestro organismo frente a las bacterias.

El intestino también se beneficia

Algunas aguas termales son potables y ricas en beneficios. Por este motivo se recomiendan para quienes padecen estreñimiento, irregularidades intestinales y colon irritable.

Para curar la piel

Las aguas sulfurosas, de hecho, son perfectas para el tratamiento de formas crónicas de dermatitis atópica y dermatitis seborreica.

Encontrar paz 

Además de tratar el cuerpo, también son buenos para la mente. Ir al spa significa desconectar de la rutina diaria y dedicar unas horas de relajación que garantizarán un bienestar prolongado. Las estaciones ideales para aprovecharlo son el otoño y la primavera, pero las ofertas no faltan ni siquiera en el resto de épocas del año.

Beneficios del lodo

Entre los tratamientos termales, el barro tiene un lugar destacado. Obtenidos de la fusión de arcilla y agua termal, se aplican al cuerpo según un programa indicado por el médico. Los beneficios que se pueden extraer de él son realmente múltiples. Por ejemplo, son particularmente adecuados para el tratamiento de la osteoporosis, la osteoartritis y el reumatismo extraarticular.

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